Nuevo estudio: frutas y verduras cercanas a Fayetteville contaminadas con PFAS como el GenX

MadridUn estudio reciente reveló que los jardines cercanos a la planta de fluorquímicos Fayetteville Works en Carolina del Norte podrían representar un riesgo de exposición a químicos PFAS para las personas. Investigadores de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, la Universidad del Este de Carolina y la Escuela de Minas de Colorado encontraron que las frutas y verduras cultivadas en estos huertos caseros presentan altos niveles de PFAS, incluido un químico llamado GenX y otros compuestos similares.

El estudio reveló varios puntos clave: Se revisaron cinco huertos urbanos para detectar 43 diferentes químicos PFAS. Las muestras de productos presentaron niveles de PFAS de hasta 38 nanogramos por gramo. Bayas e higos mostraron los niveles más altos de PFAS, probablemente debido a su alto contenido de agua. Entre 2013 y 2019, los niveles de PFAS disminuyeron generalmente, probablemente debido a los esfuerzos para controlar las emisiones.

Este estudio indica que la ingesta de frutas y verduras con contaminación por GenX también puede representar un riesgo significativo, no solo el consumo de agua contaminada. Los niños solo necesitan ingerir 17 gramos, y los adultos 68 gramos, de estos productos para tener la misma exposición que al beber agua con 10 ng/L de GenX.

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Existen preocupaciones sobre los efectos a largo plazo para la salud de consumir productos que han sido contaminados. Para los niños de entre 3 y 6 años, se recomienda que no ingieran más de 289 gramos al día para mantenerse dentro de límites seguros. Sin embargo, esto podría no reflejar completamente el riesgo, ya que no considera los efectos combinados de otros químicos nocivos en los productos.

Estos hallazgos destacan la necesidad de realizar más investigaciones. Es urgente comprender la toxicidad de los PFEAs, ya que son comunes. Sin esta información, resulta difícil evaluar con precisión los riesgos para la salud y establecer pautas de consumo seguras.

El estudio revela que las condiciones alrededor de las fábricas pueden influir en la seguridad de nuestros alimentos. Destaca la relación entre el trabajo en las fábricas y la salud de las comunidades cercanas. Al implementar normativas más estrictas y educar a la población, podemos disminuir estos riesgos y proteger a las personas que viven en estas zonas.