Pese a achaques, el carisma del papa brilla en Asia
MadridEl Papa Francisco, a sus 87 años y enfrentando problemas de salud, demostró su popularidad y energía perdurables durante su extensa gira por Asia. A pesar de sus dificultades, logró atraer a multitudes y conectarse profundamente con las personas, especialmente en regiones frecuentemente pasadas por alto por las grandes potencias globales. Su viaje de 11 días por Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur abarcó casi 33,000 kilómetros, destacando su dedicación a la proyección global y su determinación.
Destacados del Viaje:
- Interacción con una multitud de 600,000 personas en Indonesia
- Adaptación a las costumbres locales en una destacada mezquita de Yakarta
- Superando desafíos logísticos en Papúa Nueva Guinea
Durante su visita a Indonesia, el país con la mayor población musulmana del mundo, Francisco habló sobre las tendencias demográficas del país y las comparó con las de Occidente. Abordó estos temas delicados abiertamente sin ofender a nadie, demostrando su habilidad diplomática. Algunos comentaristas estadounidenses malinterpretaron sus comentarios sobre las tasas de natalidad, pero sus palabras estaban destinadas a ser conscientes culturalmente, no políticas.
En Papúa Nueva Guinea, Francisco superó numerosos desafíos logísticos y de seguridad. Estaba decidido a conectarse con todas las comunidades, incluso en áreas remotas. Utilizó un avión de carga C-130 para llegar a Vanimo, una pequeña localidad sin instalaciones para sillas de ruedas en su aeropuerto, demostrando su disposición a ignorar los procedimientos habituales para cumplir con sus misiones pastorales.
Francisco se destaca en estos viajes por su capacidad para energizar y conectar con las multitudes. A menudo, se aleja de sus discursos preparados y habla de manera directa y natural con la gente local. Esto alegra al público y demuestra que es genuinamente interesado y flexible. Cuando habla sin guion, especialmente con jóvenes y líderes religiosos locales, crea momentos más significativos e inolvidables.
El consejo de Francisco a los católicos estadounidenses de votar por el "mal menor" durante una conferencia de prensa en el vuelo de regreso a Roma demuestra su enfoque práctico hacia los problemas contemporáneos. Esto revela su comprensión de la complejidad de la política y la necesidad de orientación ética en todos los ámbitos de la vida.
El Papa Francisco sigue siendo una figura de liderazgo mundial, y a pesar de sus desafíos personales, continúa congregando a multitudes. Esta capacidad demuestra su fuerte compromiso con su labor y su conexión con diversos grupos de personas globalmente.
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